El Centro Príncipe Felipe albergará un banco con todas las imágenes médicas
La entidad recogerá la información de las historias clínicas para ofrecerla a la comunidad científica
El Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) quiere regresar a la «champions» de la ciencia internacional. Y para ello trabaja ya en la puesta en marcha de un Biobanco digital de imágenes médicas de todos los pacientes de la Comunitat Valenciana, un ambicioso proyecto que la directora general de la institución, Rosa Valenzuela, defendió cuando era coordinadora de investigación aplicada en tecnología de información en salud en la Conselleria de Sanidad.
El biobanco albergará todas las imágenes de las pruebas exploratorias que se hacen a los usuarios en los centros de salud, de especialidades y hospitales de la Comunitat Valenciana de la red pública y algunos de la privada, ya que el Hospital Quirón y el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) también han aceptado ceder las suyas para participar en la iniciativa.
De este modo, el biobanco acumulará radiografías, ecografías, ecocardiografías, TAC, resonancias, PET… cualquier tipo de exploración que se haga por imagen para detectar una dolencia o elaborar un diagnóstico.
Los millones de imágenes se almacenarán en un soporte informático, respetando el anonimato del paciente, y podrán ser utilizadas en cualquier tipo de ensayo o proyecto científico por investigadores de la Comunitat Valenciana, de España y de las redes internacionales, según avanzó Valenzuela a Levante-EMV.
Compartir imágenes
De hecho el biobanco compartirá imagénes con instalaciones similares de Estados Unidos y varios paises de Europa. También se ha firmado un acuerdo con el hospital pediátrico de Nueva York.
El biobanco se conoce con el nombre oficial de Centro de Excelencia e Innovación Tecnológica en Bioimagen de la Comunitat Valenciana, CEIB en siglas.
Aunque está por definir a cuantos años de historiales clínicos se remontará, lo que se pretende es «tener por lo menos en la base de datos los dos o tres primeros años de la historia de salud de un paciente», refiere la directora general que señala que «tecnológicamente lo ideal sería coger la del último año y, a partir de ahí, tener toda la evolución… Si se trata de un problema neurológico es bueno tenerlo almacenadas todas las imágenes para conocer la evolución del paciente».
El biobanco digital se ha instalado el sótano, en el Centro de Proceso de Datos. Lo dirige Marian de la Iglesia y en la actualidad trabajan dos investigadores del Príncipe Felipe y uno del hospital La Fe, Luis Martí Bonmatí.
El biobanco digital se ha integrado en el sistema de información de imagen médica de la Conselleria de Sanidad a través de las historias clínicas.
Biomarcadores patológicos
Valenzuela defiende el proyecto con pasión y afirma que, en cualquier tipo de exploración, la imagen da mucha información del proceso y a través de ella se pueden detectar los biomarcadores asociados a patologías: neurología, cardiología, cáncer de mama, de próstata… «Si mejoramos el diagnóstico de la imagen, cualquier nuevo biomarcador que se identifique se puede trasladar inmediatamente al paciente para mejorar su diagnóstico y tratamiento», declaró.
Los primeros hospitales que han comenzado a volcar las imágenes de sus pacientes son el Lluis Alcanys de Xàtiva, los de Ontinyent y Gandia. Otra faceta del biobanco digital es consolidarse como archivo docente para la formación de especialistas y disponer de un área concreta para patologías raras.
Convenios con empresas
Para que el nuevo CEIB tenga autonomía financiera, la directora general ha firmado ya con la empresa Bull un contrato de los denominados de «cátedra» con en el que la multinacional se compromete a realizar una aportación económica que se utilizará en contratar a investigadores a cambio de compartir la autoría de la patente.
Valenzuela negocia en estos momentos acuerdos similares con General Electric y Fujitsu, entre otras. «La inversión es mínima porque usamos la infraestructura de la Conselleria de Sanidad para montar un servicio de imágenes que ponemos a disposición de la comunidad científica».
Otro de los objetivos es que el nuevo CEIB registre la copia de seguridad de todas las imágenes médicas de la Conselleria de Sanidad.
La opción se dilucidará cuando se adjudique el concurso, a principios de otoño.