La tecnología aplicada a dependientes puede convertirse en revulsivo económico

2 de junio de 2009
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Salud
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ERI Polibienestar de la Universitat de València calcula que pueden mover 3.000 billones de euros en la UE.

Los organismos económicos internacionales más solventes alertan sobre la necesidad de buscar relevos a la construcción y al turismo, entendidos como hasta ahora, para iniciar la deseada recuperación económica. ERI Polibienestar de la Universitat de València explicó, en las jornadas ‘Emprender en la sociedad digital: tecnología y bienestar’ celebradas en el ADEIT de Valencia, por qué las tecnologías de la salud representan un nicho de mercado económico.

Stephanie Carretero, investigadora de ERI Polibienestar, ha expuesto el marco global que permite anticipar el éxito de las llamadas TICS aplicadas a la dependencia.

En primer lugar, el conocido e imparable envejecimiento de la población española: en el año 2001, el 17% de la población era mayor y en el 2060 lo será el 36% de la población española,porcentaje que nos convertirá en el país más envejecido del mundo. Ya hay casi 3,5 millones de personas con discapacidad en España y 2.019.332 tienen más de 65 años, 1,3 millones de personas en España son dependientes y 608.000 personas mayores con discapacidad viven solas en su hogar.

Estas cifras ocasionan, lógicamente, un problema social pero también significan un altísimo impacto económico para la sanidad pública española: 71.376,5 euros por año y dependiente, por el estrés que genera su atención a sus cuidadores informales (el 85% son mujeres familiares) y por las continuas atenciones hospitalarias de los mayores.

Apostar por las tecnologías es apostar por un valor seguro. La Unión Europea ha avanzado que las TICS aplicadas a los mayores de 65 años moverán 3.000 billones de euros. De hecho, según la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, el sector cerró el ejercicio 2008 con una facturación cercana a los 6.000 millones de euros, un 8 por ciento más que el año anterior. La investigadora de ERI Polibienestar, Stephanie Carretero, ha detallado también el ejemplo exitoso del instituto que dirige Jorge Garcés, aplicando la tecnología para, por ejemplo, el cuidado domiciliario de enfermos pulmonares obstructivos crónicos o de Alzheimer. Para ello, ERI Polibienestar trabaja desde un modelo de interdisciplinariedad en el que intermedian las ciencias técnicas y sociales y con una conexión directa con el mercado y con la Administración para transferir el conocimiento.

Carretero también ha aportado luz al final del túnel turístico, con caídas espectaculares en el número de visitantes extranjeros que visitan nuestra comunidad. Es el turismo accesible, en cuya investigación trabaja ERI Polibienestar desde 2005 validando la oferta turística autonómica y nacional, que podría aportar en toda la UE un impacto de 166 millones de euros al año gracias a los 130 millones de turistas dependientes en potencia. Carretero ha concluido destacando las ayudas públicas, tanto autonómicas como nacionales y europeas, para emprender estos negocios.

 

 

 

 

ERI Polibienestar de la Universitat de València calcula que pueden mover 3.000 billones de euros en la UE.

Los organismos económicos internacionales más solventes alertan sobre la necesidad de buscar relevos a la construcción y al turismo, entendidos como hasta ahora, para iniciar la deseada recuperación económica. ERI Polibienestar de la Universitat de València explicó, en las jornadas ‘Emprender en la sociedad digital: tecnología y bienestar’ celebradas en el ADEIT de Valencia, por qué las tecnologías de la salud representan un nicho de mercado económico.

Stephanie Carretero, investigadora de ERI Polibienestar, ha expuesto el marco global que permite anticipar el éxito de las llamadas TICS aplicadas a la dependencia.

En primer lugar, el conocido e imparable envejecimiento de la población española: en el año 2001, el 17% de la población era mayor y en el 2060 lo será el 36% de la población española,porcentaje que nos convertirá en el país más envejecido del mundo. Ya hay casi 3,5 millones de personas con discapacidad en España y 2.019.332 tienen más de 65 años, 1,3 millones de personas en España son dependientes y 608.000 personas mayores con discapacidad viven solas en su hogar.

Estas cifras ocasionan, lógicamente, un problema social pero también significan un altísimo impacto económico para la sanidad pública española: 71.376,5 euros por año y dependiente, por el estrés que genera su atención a sus cuidadores informales (el 85% son mujeres familiares) y por las continuas atenciones hospitalarias de los mayores.

Apostar por las tecnologías es apostar por un valor seguro. La Unión Europea ha avanzado que las TICS aplicadas a los mayores de 65 años moverán 3.000 billones de euros. De hecho, según la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, el sector cerró el ejercicio 2008 con una facturación cercana a los 6.000 millones de euros, un 8 por ciento más que el año anterior. La investigadora de ERI Polibienestar, Stephanie Carretero, ha detallado también el ejemplo exitoso del instituto que dirige Jorge Garcés, aplicando la tecnología para, por ejemplo, el cuidado domiciliario de enfermos pulmonares obstructivos crónicos o de Alzheimer. Para ello, ERI Polibienestar trabaja desde un modelo de interdisciplinariedad en el que intermedian las ciencias técnicas y sociales y con una conexión directa con el mercado y con la Administración para transferir el conocimiento.

Carretero también ha aportado luz al final del túnel turístico, con caídas espectaculares en el número de visitantes extranjeros que visitan nuestra comunidad. Es el turismo accesible, en cuya investigación trabaja ERI Polibienestar desde 2005 validando la oferta turística autonómica y nacional, que podría aportar en toda la UE un impacto de 166 millones de euros al año gracias a los 130 millones de turistas dependientes en potencia. Carretero ha concluido destacando las ayudas públicas, tanto autonómicas como nacionales y europeas, para emprender estos negocios.

ERI Polibienestar de la Universitat de València calcula que pueden mover 3.000 billones de euros en la UE.

Los organismos económicos internacionales más solventes alertan sobre la necesidad de buscar relevos a la construcción y al turismo, entendidos como hasta ahora, para iniciar la deseada recuperación económica. ERI Polibienestar de la Universitat de València explicó, en las jornadas ‘Emprender en la sociedad digital: tecnología y bienestar’ celebradas en el ADEIT de Valencia, por qué las tecnologías de la salud representan un nicho de mercado económico.

Stephanie Carretero, investigadora de ERI Polibienestar, ha expuesto el marco global que permite anticipar el éxito de las llamadas TICS aplicadas a la dependencia.

En primer lugar, el conocido e imparable envejecimiento de la población española: en el año 2001, el 17% de la población era mayor y en el 2060 lo será el 36% de la población española,porcentaje que nos convertirá en el país más envejecido del mundo. Ya hay casi 3,5 millones de personas con discapacidad en España y 2.019.332 tienen más de 65 años, 1,3 millones de personas en España son dependientes y 608.000 personas mayores con discapacidad viven solas en su hogar.

Estas cifras ocasionan, lógicamente, un problema social pero también significan un altísimo impacto económico para la sanidad pública española: 71.376,5 euros por año y dependiente, por el estrés que genera su atención a sus cuidadores informales (el 85% son mujeres familiares) y por las continuas atenciones hospitalarias de los mayores.

Apostar por las tecnologías es apostar por un valor seguro. La Unión Europea ha avanzado que las TICS aplicadas a los mayores de 65 años moverán 3.000 billones de euros. De hecho, según la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, el sector cerró el ejercicio 2008 con una facturación cercana a los 6.000 millones de euros, un 8 por ciento más que el año anterior. La investigadora de ERI Polibienestar, Stephanie Carretero, ha detallado también el ejemplo exitoso del instituto que dirige Jorge Garcés, aplicando la tecnología para, por ejemplo, el cuidado domiciliario de enfermos pulmonares obstructivos crónicos o de Alzheimer. Para ello, ERI Polibienestar trabaja desde un modelo de interdisciplinariedad en el que intermedian las ciencias técnicas y sociales y con una conexión directa con el mercado y con la Administración para transferir el conocimiento.

Carretero también ha aportado luz al final del túnel turístico, con caídas espectaculares en el número de visitantes extranjeros que visitan nuestra comunidad. Es el turismo accesible, en cuya investigación trabaja ERI Polibienestar desde 2005 validando la oferta turística autonómica y nacional, que podría aportar en toda la UE un impacto de 166 millones de euros al año gracias a los 130 millones de turistas dependientes en potencia. Carretero ha concluido destacando las ayudas públicas, tanto autonómicas como nacionales y europeas, para emprender estos negocios.

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