Impiva ofrece a las empresas desgravaciones fiscales por I+D+i
El Consell, a través del Instituto de la Pequeña y Mediana Industria Valenciana (Impiva), pone a disposición de las empresas de la Comunitat Valenciana un servicio de certificación de proyectos de I+D+i y del personal investigador que les permitirá «beneficiarse de desgravaciones fiscales en el impuesto de sociedades o de bonificaciones en las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social».
El director general del Impiva firmó este lunes en Madrid un convenio de colaboración con la dirección general de Transferencia de Tecnología y Desarrollo Empresarial y la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) con el objetivo de articular la certificación de proyectos que deriven en una patente o modelo de utilidad.Así, las once entidades certificadoras existentes en la actualidad en España, entre las que se encuentra el Impiva, dispondrán de un modelo de procedimiento común para estos casos mediante el cual la Oficina Española de Patentes y Marcas proporcionará información sobre el estado de la técnica, que servirá para valorar la novedad de los proyectos.
El proceso de certificación que ofrece el Impiva puede durar entre uno y cuatro meses y se aplica a proyectos que incorporen inversiones en I+D o innovación, que reciben una deducción en el impuesto de sociedades de entre el 30 y el 10 por ciento del coste de la inversión aplicada sobre la cuenta de resultados de la empresa.
El Consell, a través del Instituto de la Pequeña y Mediana Industria Valenciana (Impiva), pone a disposición de las empresas de la Comunitat Valenciana un servicio de certificación de proyectos de I+D+i y del personal investigador que les permitirá «beneficiarse de desgravaciones fiscales en el impuesto de sociedades o de bonificaciones en las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social».
El director general del Impiva firmó este lunes en Madrid un convenio de colaboración con la dirección general de Transferencia de Tecnología y Desarrollo Empresarial y la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) con el objetivo de articular la certificación de proyectos que deriven en una patente o modelo de utilidad.Así, las once entidades certificadoras existentes en la actualidad en España, entre las que se encuentra el Impiva, dispondrán de un modelo de procedimiento común para estos casos mediante el cual la Oficina Española de Patentes y Marcas proporcionará información sobre el estado de la técnica, que servirá para valorar la novedad de los proyectos.
El proceso de certificación que ofrece el Impiva puede durar entre uno y cuatro meses y se aplica a proyectos que incorporen inversiones en I+D o innovación, que reciben una deducción en el impuesto de sociedades de entre el 30 y el 10 por ciento del coste de la inversión aplicada sobre la cuenta de resultados de la empresa.
El Consell, a través del Instituto de la Pequeña y Mediana Industria Valenciana (Impiva), pone a disposición de las empresas de la Comunitat Valenciana un servicio de certificación de proyectos de I+D+i y del personal investigador que les permitirá «beneficiarse de desgravaciones fiscales en el impuesto de sociedades o de bonificaciones en las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social».
El director general del Impiva firmó este lunes en Madrid un convenio de colaboración con la dirección general de Transferencia de Tecnología y Desarrollo Empresarial y la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) con el objetivo de articular la certificación de proyectos que deriven en una patente o modelo de utilidad.Así, las once entidades certificadoras existentes en la actualidad en España, entre las que se encuentra el Impiva, dispondrán de un modelo de procedimiento común para estos casos mediante el cual la Oficina Española de Patentes y Marcas proporcionará información sobre el estado de la técnica, que servirá para valorar la novedad de los proyectos.
El proceso de certificación que ofrece el Impiva puede durar entre uno y cuatro meses y se aplica a proyectos que incorporen inversiones en I+D o innovación, que reciben una deducción en el impuesto de sociedades de entre el 30 y el 10 por ciento del coste de la inversión aplicada sobre la cuenta de resultados de la empresa.