El II Barómetro de Las Naves subraya la débil implantación de la perspectiva de género en la evaluación de políticas públicas
El documento radiografía, en su segunda edición, el estado de la evaluación de políticas públicas en España con una mirada igualitaria
Este estudio ha sido elaborado a partir de una muestra en la que han participado profesionales de la materia, así como público en general
El Laboratorio de Evaluación de Políticas Públicas de Las Naves, Avalua·lab, ha presentado esta mañana los resultados de la II edición del Barómetro de la Evaluación de las Políticas Públicas, que este año se ha centrado en el análisis con perspectiva de género.
Esta herramienta ha sido confeccionada a partir de un estudio realizado con una muestra abierta a personas expertas y profesionales de la evaluación, así como al público en general, en la cual se les ha preguntado sobre la situación de la evaluación de políticas públicas en España con perspectiva de género.
El estudio concluye, entre varios aspectos, la todavía débil institucionalización de la evaluación en España, la cual influye en la también débil implantación de la perspectiva de género en ésta, y recomienda el diseño de píldoras informativas, así como la formación específica dirigida al personal técnico para explicar la necesidad de una mirada de igualdad que disminuya la carencia de formación específica en evaluación con perspectiva de género, la cual es una de las principales dificultades para la consolidación de ésta.
Según el concejal de Innovación y Gestión del Conocimiento del Ayuntamiento de València, Carlos Galiana, “la evaluación es clave para la buena gobernanza, e imprescindible para aportar calidad democrática a nuestras sociedades”.
Necesaria perspectiva de género
El barómetro explica la importancia de incorporar la perspectiva de género desde el inicio del diseño de la política pública. A estas alturas, según subraya este estudio, la mayoría de evaluaciones con perspectiva de género son posteriores a la puesta en marcha de la política pública. Se recomienda, además, el uso de indicadores con perspectiva de género, y que se promueva también la formación sobre estos, una demanda que los y las propias profesionales de la evaluación demandan.
Por último, el barómetro indica la escasa aplicación o uso de los resultados y las recomendaciones de las evaluaciones con perspectiva de género, e insta a convocar premios por parte de las instituciones para que galardonan estas buenas prácticas evaluativas, así como remarca la necesidad de la tarea comunicativa y de difusión de estos procesos y resultados, como manera de sensibilizar y hacer pedagogía